- DEADMOON
- Aún no has visto nada…
- ¡¡Presencia verdadero poder!!
- Nombre: Lunaria Oneiros
- Rango: Ex-Reina Pirata, Líder de los Señores del Abismo y Agente de Azur
- Lugar de Nacimiento: El Mar Interior
- Estilo de combate: Esgrima autodidacta combinada a su control de la oscuridad.
- Edad: 24
- Etnia: Daevar
- Altura: 1,65 metros
- Peso: 46 kg
- Medidas: 81-540-83
- Hobbies: Ninguno en concreto (tiene uno diferente cada semana)
- Lo que más aprecia: La libertad
- Lo que más detesta: Su destino como descendiente de Oneiros
- Pocas personas han logrado granjearse una reputación tan temible en el inframundo de Gaïa como la Reina Pirata Deadmoon, la infame líder de los Señores del Abismo. Conocida en todas partes tanto por su descomunal poder personal así como su comportamiento imprevisible, esta enigmática mujer se ha convertido en una de las piezas más valiosas del Arconte Gaul para obtener la absoluta supremacía sobre el Viejo Continente.
- La fama de Deadmoon es merecida. Los Principados comerciales del Mar Interior maldicen su nombre y otros piratas tratan de destruirla mientras ella escapa de todos ellos con una sonrisa en el rostro. Sin embargo, su historia personal está cargada de tristes tragedias e ironías que la han convertido en la siniestra mujer que es hoy en día.
- Deadmoon, cuyo verdadero nombre es Lunaria Oneiros, es una de los últimos cinco descendientes del legado de Oneiros, conocidos como Los Condenados. Igual que todos los que llevan su sangre, Lunaria está ligada a La Muerte y, desde el mismo momento en el que nació, su vida no ha sido realmente suya. Conocedora del terrible destino de la niña y de que algún día su eterno antecesor vendría a reclamar la existencia de ambas, la madre de Lunaria trató por todos los medios de ocultarla al Inmortal. Durante años viajaron sin descanso por los confines de Gaïa sintiendo que su perseguidor estaba un sólo paso detrás de ellas. Trágicamente, mientras escapaban por el Mar Interior su barco naufragó, lo que le costó la vida a la madre de Lunaria. Antes de sucumbir en las frías aguas, la desesperada mujer logró poner a la niña en una pequeña balsa con otros supervivientes, pero la embarcación cayó en manos de piratas pocas horas después. El destino de la pequeña, que por aquel entonces tenía diez años, era el de acabar en los mercados de esclavos de Estigia aunque, al haber estado tan cerca de la muerte, el tenebroso lazo de la niña con el más allá se manifestó justo cuando el barco amarraba en la isla Ojo del Huracán. Conciente de su poder mas con poco control sobre él, Lunaria consumió la vida de todos los piratas y saltó a los muelles. Una vez en tierra, el mayor antro de perversión y crimen del Mar Interior, la joven Lunaria hizo lo que fue necesario para sobrevivir. Valiente y resuelta, decidió que viviría libre y a su manera, tal y como su madre le había enseñado.
- Hay muchas historias de cómo aquella chiquilla creció hasta convertirse en una Reina Pirata, o de cómo recibió el título de Deadmoon del mismísimo Mariscal de Tol Rauko Malakias Graft, si bien lo cierto es que con dieciséis años ya poseía su propia embarcación y comenzó a surcar los mares. A su alrededor reunió un grupo de personas que, como ella, estaban dotados de habilidades imposibles y formó el grupo de Los Señores del Abismo.
- No mucho tiempo después, ese nombre sería temido en todo el mundo.
- Sin embargo, incluso con todo su poder la joven capitana siguió siendo incapaz de escarpar de la condena de su legado. Hace menos de un año Oneiros logró dar con ella y el conflicto que estalló entre él y Los Señores del Abismo casi le cuesta la vida. Únicamente la intervención de los Árbitros Aizen y Alastor hizo posible rechazar al inmortal. Gravemente herida, Deadmoon fue llevada hasta la capital de Togarini para recuperarse. Allí, el propio Gaul le ofreció una manera de librarse de su aciago destino a cambio de su “colaboración”. Reticente a servir a otro que no fuera a si misma, Deadmoon acepó siempre y cuando mantuviese su independencia. Desde ese momento las fuerzas de los Señores del Abismo se pusieron al servicio de Azur como corsarios y, bajo la atenta supervisión del Árbitro Aizen, sus habilidades se han centrado en la búsqueda de todas las Logias Perdidas diseminadas por la costa y las islas del Mar Interior.
- Ayudada por sus facultades sobrenaturales innatas y aprendiendo esgrima de los mejores espadachines de Ojo del Huracán, Deadmoon es una fuerza de la naturaleza. Su poder, igual que su carácter, es voluble y sufre continuos altibajos, pero ella sola ha llegado a hundir barcos enteros. Tiene también un as en la manga heredado del mismo Oneiros; controla una oscura niebla a la que llama la Sombra de Muerte con la que es capaz de crear grandes extensiones de tinieblas, incrementar sus capacidades físicas o absorber la energía sobrenatural que haya a su alrededor.
- La Reina Pirata es dueña de un pequeño navío Sy’luen llamado La Luna Negra, conocido en el Mar Interior por ser uno de los mejores barcos del mundo. Aunque su tripulación es realmente escasa (incluyéndola a ella hay siete a bordo), cada uno posee habilidades de combate excepcionales y entre todos tienen potencia suficiente como para acabar con decenas de Fragatas de Guerra.
- Deadmoon es caprichosa y su humor siempre inestable. Por encima de todo, aprecia la libertad y a sus subordinados, a los que considera su familia. Pese a que no tiene el más mínimo reparo en matar, siempre trata de evitar las victimas innecesarias o acabar con la vida inocentes, ya que nunca ha olvidado sus propios orígenes. Por ello, muchos de los marinos dicen que, pese a que nadie puede oponerse a sus deseos, a veces es mejor cruzarse con ella que con algunos de los sangrientos piratas del Mar Interior.
- Pese a que no hay razones para dudar de la fidelidad de Deadmoon hacia La Alianza Azur, sigue las órdenes que recibe a su manera. Voluble como la luna e imprevisible como el mar que tanto ama, la Reina Pirata sigue surcando los mares sin otro objetivo que vivir como siempre lo ha hecho.
- Hel
- Mi mano es la mano de la muerte.
- Mi aliento, el final de la vida.
- Nombre: Madoka Inoue
- Rango: Señora del Abismo y Agente de Azur
- Lugar de Nacimiento: Eien Phaion Sheimon
- Estilo de combate: Kenjutsu combinado a su poder sobre la muerte
- Edad: 15
- Etnia: Daevar y Ryuan
- Altura: 1,57 metros
- Peso: 39 kg
- Medidas: 78-50-81
- Hobbies: Coleccionar peluches
- Lo que más aprecia: A su hermano Jerome
- Lo que más detesta: El contacto físico
- El poder no es siempre una bendición. En raros casos como el de Madoka Inoue, la pirata más joven de los Señores del Abismo, puede llegar a destrozar una vida. Desde el momento en el que vino al mundo su existencia fue una condena. Nacida en la noble casa Inoue, su madre murió al dar a luz por razones desconocidas y las personas involucradas en su nacimiento perecieron horas después. Pronto, la pequeña empezó a dar muestras de que todo aquel que pasaba tiempo con ella o la tocaba demasiado moría irremisiblemente, así que su familia la confinó en una pequeña casa en las afueras de su propiedad. Naturalmente, los rumores sobre la “niña maldita” se extendieron y sólo la influencia y poder económico de los Inoue logró evitar una investigación a fondo por parte de la Inquisición.
- Durante ese tiempo Madoka permaneció apartada de todos, con la única compañía de su hermano mayor Ichiro que la visitaba a diario. Incluso sin verse, pues sólo podían hablar a través de una puerta, entre ambos hermanos se creó un fuerte vínculo, pues cada uno encontró en el otro lo que le faltaba. Esa etapa acabó cuando la niña cumplió trece años, momento en el que la casa Inoue se vio obligada a presentarla a su futuro marido, con el que había sido comprometida incluso antes de nacer. Aunque la festividad empezó sin problema alguno, cuando su prometido tomo la mano de Hel empezó a sentirse mareado y murió pasado pocos minutos. Horrorizados, la casa Inoue desterró a la niña, considerándola un monstruo que nunca perteneció a su familia.
- Mas no se fue sola. Ichiro, incapaz de dejar a persona más importante para él, la siguió al exilio. Así fue como, huyendo de la Inquisición, los hermanos se embarcaron en un navío que les llevó a los oscuros confines del Mar Interior; la isla Ojo del Huracán. Nada más llegar, las habilidades de Madoka llamaron la atención de la Reina Pirata Deadmoon, que defendió a los hermanos frente a los subordinados de otros Señores Piratas interesados en ellos. Deadmoon pensaba que el poder sobre la muerte de la joven podría deberse a que, como ella misma, también era descendiente de Oneiros. No obstante, incluso tras descubrir que la naturaleza de sus capacidades no tenían relación alguna con las suyas, la Reina Pirata sintió empatía por su situación y decidió ayudarles. Al encontrarse con alguien a la que no le aterraba su contacto físico Madoka no tardó en establecer amistad con ella. A su lado, aprendió a divertirse y reír de nuevo, a vivir la vida de una manera que no había hecho nunca. Pronto Deadmoon se convirtió más en una hermana mayor que en una simple amiga y, cuando les ofreció un lugar en su barco como miembros de Los Señores del Abismo, Madoka no dudó en aceptar.
- Fue entonces cuando adoptó el nombre de Hel y, adiestrada por Deadmoon, empezó a descubrir el verdadero alcance de sus poderes. También recibió entrenamiento marcial por parte de su hermano y de los otros Señores del Abismo, mostrando una gran aptitud natural para matar. Al fin y al cabo, es algo que llevaba en la sangre. Desgraciadamente, aún resulta incapaz de controlar plenamente sus capacidades y, cada vez que trata de usarlas, se arriesga a ser consumida por ellas. Por esa causa Deadmoon le ha aconsejado que las emplee en momentos de máxima necesidad, una advertencia que Hel desoye demasiadas veces para desesperación de su hermano mayor.
- Aún apenas una adolescente (hace meses que ha cumplido quince años) Hel se esfuerza tanto como puede por llamar la atención de las personas que quiere. Acostumbrada como esta a matar incluso sin ser consciente de ello, no tiene el más mínimo reparo en quitarle la vida a quien sea, sobre todo si es por Deadmoon o su hermano. Evidentemente, no ha tenido problemas en ponerse a las órdenes de La Alianza si eso significa seguir con su recién encontrada “familia”.